¿Por qué los conductores prefieren el cambio manual?
Según apuntan desde Automotive News Europe, sólo el 12% de los vehículos en Europa son de transmisión automática mientras que, en Estados Unidos, sólo el 3% de los vehículos son de cambio manual.
¿Por qué existen unas preferencias de conducción tan polarizadas en el mundo? Aunque la tendencia indica un -cada vez mayor- protagonismo del cambio automático en detrimento del cambio manual, son muchos los conductores que se resisten a cambiar el tipo de transmisión. Para ellos, la experiencia de conducción del cambio manual es única.
La experiencia de conducción del cambio manual es única
De hecho, una reciente encuesta realizada en Alemania revelaba que el 46% de los conductores prefiere el cambio manual antes que el automático (el 29% prefiere transmisión automática y para el 25% restante le es indiferente el tipo de cambio).
¿Por qué algunos conductores siguen prefiriendo utilizar el cambio manual?
Si bien es cierto que el cambio automático facilita la conducción, la mayoría de los conductores europeos siguen prefiriendo el cambio manual. ¿Por qué?
1. Mejor experiencia de conducción
El cambio manual permite al conductor tener un mayor control sobre el comportamiento del coche. El uso del embrague hace posible que sea el usuario quien decida cuán revolucionado va el vehículo durante el viaje, lo que favorece una experiencia de conducción más deportiva.
Uno de los posibles motivos por los que en Europa sigue reinando el cambio manual puede ser el hecho de que en los países de la Unión los límites de velocidad son mucho más permisivos que en el resto del mundo. En Alemania, por ejemplo, existe la denominada Autobahn, 6.000 km de autopista en la que no hay límite de velocidad.
2. Precio más bajo
Además de tener un precio de adquisición -por lo general- más bajo, los coches manuales también tienen un menor coste de reparación. El cambio manual permite al conductor utilizar el embrague para reducir la velocidad, lo que supone una menor presión sobre los frenos y neumáticos. El tipo de conducción manual facilita un mejor mantenimiento de los vehículos.
El coste es y seguirá siendo un factor determinante en Europa. Atendiendo a la evolución económica durante el primer cuarto del siglo XXI (donde se han sufrido dos crisis económicas importantes en menos de 10 años), es muy posible que el tema económico siga siendo un factor de peso a valorar a la hora de comprar un coche.
3. Todo terreno
Los coches automáticos suelen tener problemas en escenarios cross-county. En situaciones de pista o terrenos más escarpados, el vehículo automático no es capaz de interpretar por sí solo que está en una situación en la que debe revolucionar más el motor, lo que se traduce en una mayor presión para la transmisión y, a la larga, en una menor longevidad del vehículo.
Sobre gustos, no hay nada escrito y es cierto que cada conductor querrá vivir su propia experiencia de conducción. Sin embargo, los vehículos manuales siguen siendo la preferencia de aquellos usuarios que quieren tener una conducción más genuina y, porque no, más divertida.
